Siendo una sustancia con la que estamos en contacto a diario, resulta inimaginable que sus recursos se agoten… Pero lo hacen. Un informe recientemente publicado por Unicef confirmaba que en dos décadas uno de cada 4 niños en nuestro planeta no tendrá acceso al agua potable. Estos datos resultan tremendamente alarmantes, sobre todo si pensamos que el agua cubre aproximadamente el 71% de la superficie de la corteza terrestre. Parece mucha, ¿verdad? Sin embargo, sólo alrededor de un 3,5% de toda esa agua es dulce y, del total del agua dulce (la que, tal vez, podríamos beber), algo más del 68% se encuentra en las regiones polares en forma de hielo y otro 30% es agua subterránea.
¿Qué supone esto? Que, en realidad, el agua dulce de la superficie, la que utilizamos las personas (mayoritariamente de los ríos y lagos) supone alrededor del 0,015% del agua total del planeta. Sí…has leído bien.
La extrema escasez de agua en países en vías de desarrollo junto con el aumento de la población provoca que la demanda sea mucho mayor que los recursos disponibles para cubrir las necesidades de los habitantes de más de 36 países, donde acceder al agua potable es un lujo.
Ligado a este grave problema está el avance del cambio climático, que provoca un incremento de temperaturas y sequías en algunas zonas del planeta, y fuertes lluvias e inundaciones en otras. Esto conlleva a que la infraestructura para sanear los recursos hídricos se vea afectada, aumentando el riesgo de deshidratación y propagación de enfermedades mortales, como es el cólera.
Resulta más cómodo pensar que este tipo de situaciones suceden en otros países, lejos de nosotros. Pero lo cierto es que, si no actuamos pronto, estos datos terminarán por extenderse al resto del mundo.
En Ciencia Divertida trabajamos con programas de concienciación del uso del agua, para que los niños, desde pequeños, sean conscientes de la importancia que tiene cada gota, y del buen uso que se debe hacer de cada una.
Algunos de nuestros talleres relacionados: “El agua, ¿a dónde va? ¿De dónde viene?”, “Cuida la Tierra”, “Efecto invernadero”, “Conservando el agua”. Modificando sencillos hábitos participamos en el cambio que hará que el resto del mundo pueda beber agua sana.
Más información: https://earthobservatory.nasa.gov/Features/Water/page1.php